No cure.

Sesión No. 3 Paciente: C.C.V Hora: 10:13 pm. 

Record:

– ¿Desde cuándo te sientes triste? –

–Desde el día en que descubrí que no era feliz –

– ¿Eres suicida? –

–Solo cuando me obligan –

– ¿Quiénes? –

–Las personas –

– ¿Qué personas? –

–Las que no deberían llamarse personas –

– ¿Qué tal tu sueño? –

–Ligero como una pluma –

– ¿Siempre eres así? –

– ¿Así como? –

–Respondona y sarcástica –

  –Estoy escondiendo lo que más puedo ¿Está funcionando? –

–Estoy aquí para ayudarte, si me escondes las cosas no podré hacer mucho –

–Nadie puede hacer nada por mí –

– ¿Por qué no? –

–Hay soledades inconsolables –

–Las soledades no se consuelan, se acompañan –

–Entonces la mía es inacompañable –

–Esa palabra no existe –

–La soledad no existe, está en nuestras cabezas –

– Y si tú sabes eso, ¿Por qué no te la sacas? –

–Es la única que está siempre, incluso cuando estoy con mis “amigos” –

– ¿ Y ella te hace sentir bien? –

–No –

–¿Entonces por qué no la sacas? –

–Ella hace parte de mí, es como querer sacarme el hígado –

–Pero solo es imaginaria –

–Es mi miembro fantasma –

–Bueno, es más fácil sacar un hígado que sacar un pensamiento –

–Lo es –

–Hemos terminado la sesión ¿Ya te has tomado lo que te mandó el psiquiatra? –

–Ya lo he hecho, parece que mi felicidad viene en pastilla –

– ¿Qué diagnóstico tienes? –

–Soledad inconsolable y síndrome de tristeza auto-inducida –

– ¿Crees que esto es un juego? –

–Estoy aquí por culpa de un juego en mi cabeza, ¿Cómo se resuelve un juego si no es jugándolo? –

–Voy por tu historial, quédate ahí quieta–

–Doctor, yo estoy más quieta que el silencio –