Cambio.

Ya sé que hace mucho no publicaba en mi blog, realmente nunca pido disculpas por no publicar seguido, ¿A quién debo pedirle perdón? Seguramente a la gente que me lee seguido, pero no es mi deber publicar siempre para entretenerlos a ustedes, yo realmente escribo aquí cuando siento que hay algo que quiere ser dicho, algo que se atrapa en mi ser y debe ser desahogado. Si contar mi vida en un diario fuese un deber con alguien más, seguramente lo que leerían sería algo muy monótono y aburrido, porque lo haría mecánicamente, como una tarea, no como una necesidad de reflejar todas esas emociones que me invaden y necesitan ser plasmadas, escuchadas (En este caso leídas)  de alguna forma.

Bueno, no sé, creo que a veces soy muy dramática y debido a eso me cuesta ser feliz, lo bueno es que soy consciente de eso, es algo que intento cambiar, ser tan negativa all the time, incluso cuando las cosas me salen bien, mi cerebro estúpido se encarga de encontrar algo por lo que amargarme, eso es terrible, no puedo ser así, tengo que reprogramarme, quiero encontrar cosas hermosas incluso en lo más horripilante, si puedo hacer lo contrario con las cosas buenas supongo que puedo encontrar belleza en lo feo, en lo que por tanto tiempo me ha hecho una persona tan sola, tan triste.  He pasado cosas duras en mi vida, pero uno no puede andar siempre en el pasado, es difícil dejar de pensar que estás gorda, que quieres vomitar, que quieres cortarte, todo eso se vuelve una adicción que se apodera de ti cuando estás mal, reaparece por temporadas (En mi caso es así) Porque cuando tú estás dispuesto a dejar ese mundo, pasa así, lo dejas por mucho tiempo y en una remota mañana donde nada te salió bien decides que te odias, es el fin del mundo, comiste mucho, vómito, cortadas, bueno, cosas feas que saldrían en una película no apta para menores de edad.  Pero hay que ser fuerte, dejar eso atrás, hay muchas cosas que todavía quiero lograr. 

Últimamente que he sido más consciente de que debo cambiar, he disfrutado más las salidas con mis amigos, me he reído más, he hecho reír más, escucho a la gente que está en la situación en la que yo estaba, en ese estado de soledad en el que sientes que la gente te escucha pero no está ahí en realidad, de todas formas nadie es perfecto, nadie puede estar dispuesto el 100%  del tiempo para ayudarte cada vez que tienes una de esas crisis metafísicas, uno debe aprender a salir de esas cosas por su cuenta, es verdad que el punto de vista de otra persona es importante también, pero no debemos depender siempre de ese consejo, deben saber que desarrollar su ser interior va a hacer que salgan de esa depresión más fácilmente, todos los seres humanos siempre seremos incomprendidos en nuestro mundo individual, nadie nunca entenderá a una persona como esta quiere, pero eso no es motivo de tristeza, no hay que hacer la pataleta de “nadie me entiende”, no, es obvio que nadie te entiende, nadie nunca lo hará en su totalidad, la única persona que se entiende es usted mismo, aunque a veces esté confundido y no sepa en qué lugar de su mente esta, en el fondo hay un orden lógico de todo eso, habrá temporadas en que se alcanzará la armonía y en otras en las que todo se va derrumbar, porque la vida es así, hay que admitirlo, no podemos ser armoniosos siempre porque somos seres humanos y tendemos al caos. El caos no siempre es malo, se puede sacar provecho de él, muchos artistas y escritores famosos hicieron sus mejores obras cuando estaban en la etapa más dura de sus vidas, supongo que el secreto de la liberación del ser es encontrar la forma correcta en la cual descargar todo ese odioso negativismo que de vez en cuando se apodera de nosotros. 

No sé que más decirles…Traten de ser felices,  por más difícil que parezca, todos tenemos la capacidad de serlo.